in

Crítica de Paranormal Activity – Los señalados

Nada más comenzar el nuevo año se estrena Paranormal Activity – Los señalados, el spin-off de esta famosa saga dirigida y escrita por Christopher Landon. En esta nueva entrega conoceremos a Jesse, un americano con raíces latinas (si la veis en versión original veréis que muchos personajes hablan castellano, lo que se ahorraran en doblaje…) que con sus 18 añitos recién cumplidos sufre una maldición (en serio? de verdad? Y yo que creía que su único problema era lo feo que ha salido en la foto, vaya…). Su familia y amigos intentarán por todos los medios entender qué le está pasando y ayudarlo en todo lo que puedan. Hasta aquí podemos ver que el argumento no tiene ningún misterio y, por desgracia, los 84 minutos que dura la película no nos darán ninguna otra sorpresa interesante. Miento, hay una:

El protagonista es mono (esta foto no le hace justicia, aviso). Y ya está, no hay nada más.

Me gustaría saber qué se le pasó exactamente al director por la cabeza cuando acabó de rodar esta película, seguro que fue algo así: Me voy a forraaaaaaar, me voy a forraaaaar, les colaré este bodrio y me voy a forraaaaaaaar (todo cantado con la melodia de: Everybody sings a Song Duda Duda). Porque es imposible, no, IMPOSIBLE estar orgulloso de esto. Argumento plano, personajes que aparecen y desaparecen en la historia sin ton ni son y sin saber qué pintan ahí (lo ha hecho adrede para colarnos una segunda parte??! Noooo!! Matadme antes que esto suceda), final imprevisto, seguramente porque se le acabó la batería de la camera, planos malos (creía que el rollo de REC ya había pasado de moda, veo que me equivocaba…) etc.

Cuando me propusieron ir a verla, creí que era una película de terror, pero se ve que me equivoqué de sala y acabé viendo una comedia.

Hola! El público no se enterará de quién soy ni 

cómo he llegado hasta aquí, pero yo salgo en una peli

y ellos no, bleehhhhh 😛

Me esperaba salir un poco asustada, pero como mucho la película me hizo marear (movían tanto para aquí y para allá la cámara que mareaba más que una película en 3d en el IMAX). Tampoco es que pidiera mucho, pero un saltito de la butaca en una película de terror es casi obligado, por lo menos si quieres que el público salga de la sala medio contento o sin esa sensación tan fea detrás la oreja (pista: comienza con la e y acaba por stafa).

Nosotras somos las hermanas guapas de la chica de The Ring,

evidentemente, tampoco sabréis quiénes somos ni de dónde

hemos salido así que os damos una pista: venimos de la pelu. 

En fin, espero que este 2014 nos traiga algo más, porque de momento, con esta película lo hemos comenzado un poco mal no, bastante, y ya lo dejo aquí antes de que me salgan espumarajos por la boca y comience a hablar lenguas muertas que eso, como mucho, me serviría para llenar un poquito más el currículum.

Os dejo con la imagen chorra de la película:

Para qué utilizar una ouija cuando tienes un Simón? Mucho más útil, dónde va a parar…

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Loading…

0