Thaïs Parvez
Se suele decir que todos los caminos llevaban a Roma, pero una sola noche en la ciudad de las siete colinas es capaz de destapar nuevos acueductos amorosos o al menos eso nos invita a soñar Julio Medem en su última película: “Habitación en Roma”, remake de la chilena “En la cama” (2005) de Matías Bize.
El realizador donostiarra nos introduce en una aventura amorosa donde una habitación de hotel en el centro de Roma se convierte por una única noche en la testigo principal de los enredos afectivos y sexuales, sobre todo sexuales, de dos mujeres jóvenes que se acaban de conocer.
El cineasta presentó el pasado miércoles en Barcelona la cinta junto uno de los productores y sus dos protagonistas femeninas, Elena Anaya y Natasha Yarovenko.
Julio Medem, que asegura que ha sido su película menos densa ya que fue rodada en cuatro semanas, revela como fue el rodaje y cuál fue la reacción del público tras su presentación en el pasado Festival de Málaga: “Para mí ha sido un reto ya que nunca he rodado durante tanto tiempo en un único sitio.
“Los paisajes de muchas películas mías eran un poco como el punto de inspiración, pero aquí no hay paisaje. Lo que hay es un interior, una habitación [así que] mi sensación es que la película sigue cayendo bien [aunque] no sea una película para todo el mundo.”
“Cuando terminé esta película salí desgastada emocionalmente, pero limpia y pura.” -Natasha Yarovenko.
La cinta pone de manifiesto la historia de un amor prohibido que transcurre dentro de cuatro viejas paredes empapadas de la historia más clásica.
Medem habla sobre porqué optó por una ciudad como ésta para su película: “En principio son sólo dos actrices y Roma [que] es una ciudad con mucho pasado, [así que] la película propone belleza. Es verla y dejarse llevar por la piel.
“Mi sensación es que genera una tensión muy grande, crea mucho morbo, un grado de intimidad enorme.”
Las dos actrices que se desnudan de cuerpo y alma coinciden con la visión de Medem.
La ucraniana Natasha Yarovenko califica la filmación de la película como un proceso terapéutico: “Nunca he tenido relación con ninguna mujer, así que, como mi personaje, al principio tenía miedo.
“[Pero] era como investigar algo nuevo para mí, un viaje. Cuando terminé esta película salí desgastada emocionalmente, pero limpia y pura [a la vez].”
La intérprete madrileña Elena Anaya coincide con su compañera de reparto, pero además explica que a pesar de contener escenas eróticamente muy explícitas, “Habitación en Roma” no es una película sucia: “Realmente no son escenas de sexo [porque] no tienes que practicar[lo], así que nosotras no hemos hecho cosas que no estén dentro del oficio.
“Yo dialogo con mis personajes, pero no los juzgo nunca.” – Elena Anaya
“Lo que me seduce es que cuenta una historia de amor en estado puro- añade Anaya- además de que [Alba, mi personaje] te permite tener unas vivencias, unas emociones. Yo dialogo con mis personajes pero no los juzgo nunca.”
Conscientes de que la película puede levantar cierta polémica entre crítica y público, ellos confían en que “Habitación en Roma” no pasará desapercibida para aquellos quienes se atrevan a pisar las salas de cine porque lo importante, como dice Anaya, es “que la película llegue.”
“Habitación en Roma” actualmente está disponible en la cartelera de los principales cines del país.
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